CIAL Fórum

19 y 20

Ciencia para recuperar los polifenoles olvidados del café y asimilarlos donde más falta hacen.

Los estudios han demostrado numerosos beneficios de los compuestos fenoles, y los científicos se concentran en aumentar las fuentes de las que obtenerlos y conseguir que el organismo los aproveche al máximo.

19 octubre, 2023 - 16:07 h

El investigador Miguel rebollo, en un momento de la jornada.

La organización del CIAL Fórum 2023 no pudo programar mejor la presentación del investigador del Grupo Alimentos, Estrés Oxidativo y Salud Cardiovascular de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Miguel Rebollo. Poco antes de la pausa de media tarde, ideal para compartir las ideas que los ponentes han vertido a lo largo del día y una taza de café, Rebollo ha desgranado al detalle el potencial de revalorización que tienen algunos subproductos que se generan en la producción del café. Según su trabajo, el potencial de la planta para obtener ingredientes bioactivos es mucho mayor del que se imagina quien no conoce más que la infusión.

El científico ha centrado su análisis en los polisacáridos y (poli)fenoles presentes en la cáscara de café, y ha explicado cómo se integran en la matriz fibrosa de la pared celular, formando interacciones macromoleculares que, según sus indagaciones, son cruciales para entender cómo se liberan y actúan los (poli)fenoles en el tracto digestivo.

También ha destacado la asociación de la fibra y los (poli)fenoles, “esencial para comprender el potencial de estos ingredientes derivados de la cáscara de café en términos de beneficios para la salud, incluyendo su capacidad antioxidante, su habilidad para inhibir enzimas digestivas y su potencial para reducir la absorción de glucosa y lípidos”, ha apuntado. El motivo fundamental es que la asociación entre la fibra y los (poli)fenoles puede tener implicaciones en la liberación y actividad de estos compuestos en el tracto digestivo. El investigador también ha abordado en su presentación las diferencias químicas y funcionales de la harina y los residuos insolubles en agua derivados de la cáscara de café.

“La importancia de esta investigación radica en su enfoque en la sostenibilidad y eficiencia en la producción, ya que al revalorizar subproductos que tradicionalmente se consideraban residuos, como la cáscara de café, no solo estamos reduciendo el desperdicio sino que también estamos creando valor añadido”, ha resumido el investigador. Por su parte, su colega de la UAM María de las Nieves Siles ha centrado su intervención en su estrategia para ayudar a que los compuestos fenólicos estudiados por Rebollo y muchos otros puedan ser asimilados mejor por el organismo y, así, ejercer sobre la salud los beneficios que han detectado los investigadores.

“Los compuestos fenólicos son compuestos bioactivos que sufren cambios y modificaciones durante su paso por el tracto gastrointestinal, por eso el desarrollo de sistemas de nanoencapsulación que eviten su degradación y potencial pérdida de bioactividad se postula como una de las estrategias más relevantes hoy en día”, ha explicado Siles. El trabajo que ha presentado se centra en el diseño de nanoemulsiones capaces de encapsular un extracto rico en compuestos fenólicos que favorezcan la liberación controlada de estos compuestos bioactivos en los órganos diana. Se trata de un paso fundamental para conseguir que estos compuestos ejerzan su efecto antioxidante, antiinflamatorio o antiproliferativo, entre otros, allá donde es necesario. Por ejemplo, en el cerebro.

Es en el órgano maestro del cuerpo donde se centra el trabajo de la investigadora del grupo BEA (MicroBioma, AlimEntación y SAlud) del CIAL Marta Montero, quien ha presentado su investigación sobre los efectos de los metabolitos fenólicos presentes en alimentos vegetales en un modelo de taupatía de la enfermedad de Alzheimer. Todo ello en el contexto del eje microbiota-intestino-cerebro.

El trabajo también ha estudiado los efectos de uno de dichos metabolitos en la actividad eléctrica de las regiones del hipocampo y la corteza cerebral. “No se conoce nada sobre cómo los metabolitos fenólicos pueden afectar a la actividad eléctrica del cerebro, pero en nuestro caso mostramos que son capaces de hacerlo, lo que abre un campo de investigación nuevo y muy amplio”, ha subrayado Montero. “El objetivo principal de nuestra investigación es precisar cómo la dieta, y en particular los polifenoles presentes en alimentos vegetales, utilizando el vino como modelo, y otros factores de vida interactúan con el microbioma intestinal, en relación con el deterioro cognitivo, lo cual es de gran relevancia para el ámbito clínico”, ha concluido.

El investigador del CIAL Pouya Mohammadnezhad también ha participado en la jornada con una presentación sobre la aislamiento y caracterización de compuestos bioactivos de Ferula persica y su evaluación neuroprotectora.

 

Público asistente a la primera jornada del CIAL Fórum 2023.